Instruyámonos, porque necesitamos de toda nuestra inteligencia. Organicémonos, porque necesitamos de toda nuestra fuerza. Movilicémonos, porque necesitamos de todo nuestro entusiasmo”.
Antonio Gramsci

sábado, 26 de junio de 2010

Paseo por la Diversidad: Por el Derecho al Matrimonio para TODOS y TODAS

Lunes 28/6 - 17 a 21:30hs.
Plaza Independencia

Paseo por la diversidad

POR EL DERECHO AL MATRIMONIO
PARA TODOS Y TODAS

Show drag queers, bandas, murgas, stands con info,
Altertango, y mucho más!

Organizan: Vanguardia Queer, OMIN, Diversidad Universitaria, Subsec. de Género del CECyPS, ACIDS,
Redes Nueva Frontera, Ultravioletas, Diversidad Socialista, DmasI, La Cortina.

Adhieren: INADI, Campaña Nacional por el Derecho al Aborto, Organismos de DDHH

Invita:
Sec. de Política Universitaria del CEFyL
La Mecha

domingo, 20 de junio de 2010

Acerca de la lucha estudiantil...

Acerca de la lucha estudiantil,

o de cómo la burocracia puede aparatear e intentar levantar una asamblea legítima,

y de cómo, a pesar de todo, la vamos a seguir peleando

El 10 de junio los estudiantes de la FFyL nos juntamos. Hicimos asamblea. No hay que exagerar: éramos alrededor de ochenta personas. No una multitud, es cierto, pero considerando que llevábamos tres años sin realizar una sola asamblea, tal tumulto no dejaba de ser significativo. Tampoco legítimo. Todas las fuerzas estaban presentes: los “troskos”, los peronistas, incluso los radicales, amos y señores del Centro. Delegados de curso, incluso. Otro hecho histórico desde las jornadas del 2007. Nosotros.

Ésos ochenta decidimos varias cosas: 1) que no queríamos cámaras de seguridad en las aulas, que no queríamos que una resolución le descontara los días de paro a los docentes, que no queríamos seguridad privada ni policías. Porque la policía, sabemos, no cuida; sino que vigila. No defiende; sino que persigue. 2) que queremos una sola fotocopiadora, financiada por la Universidad, que no queremos manos privadas en el medio que se lleven nuestro dinero, que no queremos clientelismo sino un cuerpo de delegados que la dirija, que queremos decidir qué se hace con las ganancias, que queremos más becas, que queremos que los trabajadores no cobren dos pesos con cincuenta por hora ni estén en negro. La segunda decisión fue unánime. Todos los presentes, todas las agrupaciones, sí, quién lo diría, peronistas y radicales incluidos, votaron todos que sí.

Decidimos, además, juntarnos en una semana, el jueves 17. Ir al Consejo Directivo. Exigir nuestra fotocopiadora. Y fuimos. El Consejo dijo que no a las cámaras. De la fotocopiadora, no dijo nada en concreto. Que hay que llevarlo a Consejo Superior, que no nos compete. Que el verso de siempre. Ellos sí pueden decidir poner cámaras, sí pueden ampliar el edificio, sí pueden llenarse los bolsillos con los aranceles que nosotros pagamos. Pero no pueden darnos nuestra fotocopiadora.

Se preguntarán, quizá (y si no, deberían hacerlo), si el CEFyL defendió nuestras decisiones. No. No lo hizo. Desconoció el petitorio presentado al Consejo, es decir, el petitorio de la Asamblea, es decir, la voluntad del órgano máximo de gobierno de los estudiantes. Pero la historia sigue.

El Consejo dice no, o no dice nada. Bueno, entonces asamblea. Nos reunimos. Ya no somos ochenta, hay ciento cincuenta. ¿Quiénes son? ¿Desde cuándo suceden estas cosas? Sucede cuando la burocracia tiene miedo de que los estudiantes se organicen, y decidan pelear. Sucede cuando la burocracia tiene miedo, y entonces, urde la maniobra nefasta de mentir a los estudiantes y convocarlos a boicotear las decisiones de una Asamblea soberana.

“Vayan a la asamblea del 17, que los troskos de mierda quieren tomar la facultad. Hay que levantar la asamblea.” Ése mensaje les llevó Franja Morada a los estudiantes de la carrera de Inglés, que confiando en tales mentiras, fueron e hicieron lo que Franja pedía. Es decir, se armó un rumor, una mentira, y se la sembró para generar miedo. Pero lo más significativo sería preguntarse si algún estudiante de los que fue a levantar la Asamblea se enteró por qué se peleaba, si se enteró que la lucha es noble y justa, si sabían que Franja Morada no defendió lo resuelto en Asamblea en el Consejo, si saben que estos radicales son igual a los radicales que y peronistas que dicen no a la fotocopiadora de los estudiantes, y que quieren poner cámaras, y que nos pusieron las cruces en las aulas (que sacamos en el 2005), y que nos educan con planes retrógrados, y que venden nuestra universidad a las multinacionales mineras, y otros etcéteras igual o más nefastos que éstos.

La segunda Asamblea, ya lo saben, fue un caos. Daniel Amico, presidente del CEFyL intentó levantar la Asamblea, pero no pudo hacerlo. Seguimos reunidos, discutiendo. Los que se quedaron vieron lo que era realmente una Asamblea democrática y no un fantoche de democracia. Volvimos al Consejo, volvimos a exigir nuestra fotocopiadora. Desde el jueves 24 de junio comienza a funcionar una Comisión con mayoría estudiantil para concretar una propuesta sobre la fotocopiadora.

Nuestras fuerzas no deben quedarse en el mero participar en esa Comisión, que desde luego, debe atar sus decisiones a la Asamblea estudiantil. La Comisión funcionará porque ésos ochenta presionamos para que se avance en pasos concretos hacia una fotocopiadora de los estudiantes, porque nos organizamos, porque no nos dejamos embaucar por la Franja Morada.

Nuestras fuerzas no deben quedarse en la mera participación en esa Comisión. Todo lo que se logra, es fruto de la organización, de la lucha. Ésa es la gran lección de estas jornadas.

sábado, 12 de junio de 2010